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Una visita diferente...


Llevo semanas sin pasar por aquí. No ha sido por falta de ganas, ni de cosas que contar, si no que el 2013 no ha empezado precisamente como me habría gustado... Digamos que enero ha sido un mes de despedidas. Algunas previstas, otras imprevistas (al menos hasta cierto punto), algunas temporales... y algunas definitivas. Las despedidas no por previstas, ni por temporales, son menos despedidas. Y de las definitivas... mejor no hablar.

Pero no todo han sido despedidas. También hemos tenido visita (una visita muy especial, como todas, pero esta vez por otros motivos... que ahora veréis!). Como contaba en mi anterior entrada, gracias a Flickr he conocido gente estupenda... una de ellas es Marta, que empezó siendo contacto en Flickr, luego en Facebook, y ahora para mí es una amiga más (aunque aún no nos conocemos en persona... Quien sabe, quizás algún día!!) Como cuenta ella misma en su blog, hace un tiempo tuvo la genial idea de mandar a su Danbo de viaje por el mundo, a las casas de sus contactos de Flickr que quisieron apuntarse al juego... y así Danbo empezó a viajar: pasó por media España, cruzó el charco hasta Miami y Argentina y, finalmente, hace un par de semanas llegó a Munich. Aquí podéis ver un resumen de su viaje.

¿Y quién es Danbo? Para los que no lo conozcan, Danbo es un pequeño muñeco que simula estar hecho de cajas de cartón. Fue creado por Kiyohiko Azuma, un ilustrador japonés, a petición de Amazon Japón. Apareció en el capítulo 28 de Yotsuba to! (un comic manga) y tuvo tal éxito que el personal se dedicó a hacer robots similares de "danboru" (cartón ondulado), de ahí el nombre... El caso es que Danbo se puso de moda y mucha gente se dedicó a hacerle fotos y a subirlas a Internet. La verdad es que no me extraña, es una cosita!! Se puede comprar en Amazon y en eBay, pero investigando por internet he encontrado este tutorial para hacértelo tú mismo... igual uno de estos interminables domingos de invierno nos animamos y todo (como me conozco, no prometo nada).

Volviendo al tema, la idea de Marta, era documentar con fotos el viaje de Danbo... Y así lo hemos hecho: he aquí su paso por Munich.

Empezamos, como no, sacando a Danbo a la nieve:

Nos dimos un paseo por Starnberg:

(sigo sin cansarme de esa vista.)

Y por supuesto, le enseñamos Munich, donde nos hicimos fotos en algunos sitios típicos:

(Dallmayr viene a ser el Fortnum & Mason muniqués, un Embassy pero a lo bestia, con delicatessen de todo tipo y donde lo más conocido, quizás, es el café. Los desayunos, por cierto, no están nada mal...)


Desde la Iglesia de San Pedro se disfrutan las mejores vistas de Munich... 13 pisos a pie, pero bien merece la pena. El día, además, estaba muy luminoso, así que las vistas eran impresionantes, pero hacía mucho, mucho, ¡MUCHO! viento, así que no me atreví a mucho más...

Y terminamos en Marienplatz, en la fuente del pez (donde Danbo casi se nos pega un baño involuntario por culpa del viento!), estrenando Lederhose (los pantalones de cuero que se ponen los bávaros en todas las ocasiones) y tomando un "aperitivo" a la bávara, con salchichas de Nürnberg, las preferidas de mis hijos (hay vida más allá de las Wiener, las Bratwurst, y las salchichas blancas), unos Breze, Weissbier (cerveza de trigo), ¿qué más se puede pedir? ;-)


A Danbo por supuesto no le dimos cerveza, sino Apfelschorle, o lo que es lo mismo, zumo de manzana con agua (!!!) que es lo que suelen beber los niños alemanes (los míos, ahora, también. Más sano que la Coca Cola, ¿no?)

Y hasta aquí la visita de Danbo. Faltó foto de familia, pero no es que se me olvidara, es que cuando no quieren colaborar, no hay nada que hacer...

Una personita muy especial (o más bien dos)

Hace unas semanas tuvimos el gustazo de recibir en casa una visita muy especial... En realidad todas las visitas son especiales, claro está, pero esta vez era especial porque Elena, además de ser mi BFF, venía muy bien acompañada...


Aunque el tiempo no acompañó el fin de semana, nos fuimos al centro y nos empapamos de ambiente y comida bávara en el Weisses Brauhaus. Como ya conté aquí, esto empieza a ser tradición (yo creo que solo nos hacen falta un par de visitas para que los camareros nos empiecen a recibir con un "¿lo de siempre?), pero no por ello nos gusta menos. Para mí este sitio además tiene un puntito romántico porque fue el primer sitio donde comí en Munich cuando la visité por primera vez hace ya 5 años (quien me iba a decir a mí entonces que iba a terminar volviendo tan a menudo!). Tengo que aclarar que la comida alemana tiene su punto, si sabes cuando parar. Es decir, no es para todos los días porque es grasienta y pesada, pero si es de vez en cuando entra de maravilla. Y a mí cada día me gusta más (¿será parte del proceso de adaptación?)


Pero como decía, el tiempo no acompañó y nos tocó mojarnos un pelín...


También tuvimos tiempo para hacer un poco de turismo y acercarnos a Garmisch-Parternkirchen, que es un pueblo precioso a poco más de una hora de casa (famoso por sus estaciones de esquí, por cierto, y patrimonio de la humanidad).




Detalle de una puerta (door detail)

Bueno, no me enrollo más que yo sé que en realidad a quien queréis ver es a la princesa, aquí os dejo con ella:




(por las dudas, que sepáis que los ojos los tiene así, no llevan retoque!!)

Incluso Rodrigo cayó rendido a sus encantos, y eso que es un anti-niñas declarado (como su hermano).


Feliz semana!

Landsberg am Lech (o la segunda parte de la segunda visita)

Como contaba en el post anterior, hace unas semanas tuvimos el honor de recibir una visita muy esperada y deseada. Los abuelos paternos nos visitaron y además de hacernos compañía nos llenaron la despensa, así que les correspondimos haciéndoles un pequeño tour por la zona (es decir, aprovechamos para seguir viendo sitios nuevos).

En nuestra biblia de Munich (es decir, "la guía") aparecía un tal "Landsberg am Lech", pueblo del que nunca habíamos oido hablar pero pintaba bien, con su propio río (el Lech), callejuelas pintorescas, casitas de colores, bretzels recién hechos (¡por fin!)... Y hacia allí nos dirigimos. Una excursión cómoda, a unos escasos 50 kms de casa; hacía niebla y frío pero eso hizo que disfrutáramos más de la comida -por lo menos yo-. Fue la ocasión perfecta  para que algun@s (ejemmmm) se metieran el primer codillo entre pecho y espalda (diosmioquépedazodeplato!), aunque yo opté por el goulash de ciervo... que empieza a ser uno de mis platos preferidos. Y es que os cuento esto, no porque haya fotos del momento (que no las hay), sino porque yo ya asociaré para siempre este pueblo pintoresco con el delicioso goulash que me tomé (BBB, bueno bonito y además, barato. Espero que Fernando se acuerde del nombre del restaurante!). Y claro, al subir las fotos me he acordado... Peeero públicamente lo digo, el top 1 en goulash de ciervo no lo hacen aquí precisamente...

Y llegados a este punto, os dejo con Landsberg!



Los patinetes... ¡que no falten!


(no está torcida, es que era una cuesta!)


Y la ansiada foto de familia... al editarla me di cuenta de que yo no era la única missing! Se nota el frío eh...! Quien lo diría ahora, llevamos varios días a 9º...


Y otra cosa que he confirmado es que, sí, soy rara, me gusta la niebla!

Feliz fin de semana!

La primera visita

La semana pasada tuvimos una visita muy, muy esperada. Opa y Oma vinieron a vernos (en realidad a quién venían a ver era a los niños y ni se molestaron en disimularlo, pero les queremos igual porque además vinieron cargaditos de cosas ricas).

DSC_5497_LBV_BNFilm_web

La verdad es que hice menos fotos de las que me habría gustado, pero es que a veces es mejor disfrutar de la compañía y olvidarse de la cámara...

Aprovechamos para conocer algún restaurante "típico" (resulta que en "mi" pueblo tenemos un indio más que decente, un afgano espectacular, un running sushi, un par de vietnamitas y, por supuesto, montones de italianos y típicos bier gartens):


Nos pasamos por lo que mis hijos llaman "el blumen" (autoservicio de flores: tú te lo guisas, tú te lo comes. Incluso te prestan los cuchillos para cortarlas. ¡¡Me está empezando a entrar complejo!!). Le estamos sacando más partido que al de calabazas, sólo de pensar en pelarlas se me quitan las ganas y además veo tantos tipos de calabaza distintos que no sé por donde empezar....!

Blumen

Sunflower field

Mosaico blumen

Después de estas visitas hemos descubierto que los girasoles , como diría Rodrigo, "molan mucho", pero hay que tener la picardía de ponerlos en un jarrón adecuado si quieres evitar sustos a las 3 am (menos mal que sólo lo oyó Opa. Y que el jarrón era de los chinos).

Por supuesto, también pasamos por el Oktoberfest (aunque lo hicimos como lo que éramos, turistas. El año que viene -diosmediante- seremos insiders):

Oktoberfest



El broche de oro fue la fabada (traída directamente de Asturias) que nos dejaron hecha. Con su chorizo y su morcilla, como está mandao. Olivia se encargó personalmente de que no sobrara nada:


(a Olivia la única forma de pillarla para la foto es comiendo. Y puntualizo: la criatura ya había comido. ¡La fabada fue el postre!).

Y sobre todo, disfrutamos de la compañía, que era de lo que se trataba.

Ahora, a contar los días para la próxima visita, que tendrá lugar en poco más de un mes y que documentaremos también como es debido! (vayan pidiendo número y espabilando los que quieran venir!!!)